Aprender la hora, es uno de los hitos que los niños deben alcanzar llegada una cierta madurez. Para los pequeños, es una tarea algo complicada ya que antes deben aprender a leer y también deben saber contar. Además, su noción del tiempo es mucho más simple que para los adultos. Los pequeños saben que por la noche duermen, que por la mañana van al colegio y que cuando tienen hambre, comen.
No existe una edad media para aprender a leer la hora, como suele ocurrir con los niños, cada uno tiene un ritmo distinto y todos necesitan su tiempo para asumir cada aprendizaje. Por lo tanto, es importante que no te precipites y no intentes enseñar a tu hijo a leer la hora si no está preparado. Esta es una lección que suelen aprender en el colegio, a medida que van alcanzando otras metas como las mencionadas.
Iniciar a los niños en el concepto de la hora
Lo que sí puedes hacer desde casa, es enseñar a tus hijos lo que significa la hora. Para qué sirve un reloj, por qué lo necesitamos para organizar nuestro tiempo etc. De esta forma, los niños podrán adentrarse poco a poco en este aprendizaje y cuando llegue su momento, estarán preparados para aprender a leer la hora e interpretar un reloj.
El juego es el mejor método de aprendizaje para los niños, y para aprender el concepto del tiempo, también puedes echar mano de algunos sencillos trucos y juegos.
El tiempo y las rutinas: un juego para aprender a leer la hora
Este es un juego ideal para que los niños aprendan a dividir el tiempo a través de las rutinas. Para ello, necesitarás hacerte con un papel bien grande, puedes unir varios folios con cinta adhesiva para lograr un mural grande. Después, dibuja en el centro dos circunferencias de un buen tamaño, que harán las veces de relojes. Escribe los números en la circunferencias y decora los relojes como más te guste.
Después, busca con tus hijos en las revistas que tengas en casa, en catálogos de supermercados o en Internet, imágenes que representen las rutinas habituales. Como por ejemplo, la hora de dormir, de comer, de ir al colegio, de ducharse, merendar, salir al parque etc. Incluso, puedes pedir a tus hijos que los dibujen y coloreen ellos mismos y después recortarlos.
Para terminar, tendrás que pegar cada imagen en su hora correspondiente. De esta forma, los niños podrán ver de una forma más clara en qué consiste la división del tiempo a través de sus actividades diarias. Podrás mostrarles cada día cual es la siguiente rutina, y así, irán entendiendo la noción del tiempo. Decora su habitación con el mural y cada día, utilízalo para mostrar a tus hijos cual será la siguiente actividad.
Aprender a leer la hora
A partir de los 6 o 7 años, los niños van adquiriendo los conocimientos necesarios para poder aprender a leer la hora en un reloj. Para ayudarlos en esta tarea, puedes fabricar un reloj con cartón que de nuevo, fabricarás con los niños y así lo decoraréis juntos. Dibuja también las agujas del reloj y recórtalas, para que se muevan y puedas jugar con el reloj, ancla las agujas con ayuda de un clip.
Una vez que el reloj esté terminado, colócalo en su habitación y así cada día podréis trabajar un rato en esta tarea. Aprovecha una vez más las rutinas de cada día, para pedirle a tu hijo que la marque sobre el reloj. Así, poco a poco irá tomando consciencia del tiempo y aprenderá a leer la hora de una forma mucho más sencilla y divertida.
El primer reloj
Hoy en día, estamos acostumbrados a mirar la hora en formato digital a través de el teléfono móvil y otros dispositivos que solemos tener en casa. Pero esto no ayuda en nada al aprendizaje de los niños, para ello, necesitarán tener un tradicional reloj de pulsera con manillas. Además de utilizarlo para aprender, les encantará tenerlo como un complemento más y les ayudará a sentirse más mayores.