El 14 de febrero es un día especial para las parejas porque pueden plasmar su amor en pequeños detalles. Está claro que el amor no solo se debe demostrar en San Valentín, si no que es necesario hacerlo los 365 días que lo conforman. Aunque nunca está de más tener un día para poder además, celebrar lo más bonito que existe en la vida: el amor.
El día 14 de febrero es un día para que los niños reflexionen sobre el amor, lo que significa estar enamorado románticamente y también, para que entiendan que en la vida existen muchas clases de amor. Amor por los padres, amor por los hijos, amor por los animales, amor por la vida… ¡el amor forma parte de la vida de todas las personas!
Por eso, San Valentín es un día para celebrar en familia también. Aunque tengas los planes pensados para hacerlo con tu pareja, también podrás celebrar este bonito día con tus hijos para que aprendan lo que significa este maravilloso y gran sentimiento que todo lo puede… ¡el amor!
Se puede celebrar haciendo cosas juntos, saliendo a disfrutar de experiencias en familia, realizar una comida que os guste a todos, participar todos juntos en una actividad conjunta que os llene… Aunque sea solo un ratito al día, merece la pena dedicarlo para disfrutar de que el amor forma parte de vuestras vidas.
Habla con tus hijos sobre lo importante que es tener amor en la vida, de cómo se debe cuidar y de qué clases de amor no son saludables y que se convierten en algo tóxico de lo que se debe escapar… En cambio, el amor incondicional siempre será un sentimiento profundo que nos llenará los corazones con su cálido confort emocional. Y tú, ¿estás enamorado de la vida y de tu familia? ¡Pues a celebrarlo!