El ritmo de la vida cotidiana es vertiginoso, la sociedad es cambiante y las certezas cada vez se reducen a un número menor de afirmaciones. Por ello, muchas personas sienten que su realidad las supera día tras día. Además, en la vida de cualquier persona, hay momentos mejores y peores, por lo que en ocasiones necesitamos recurrir a los servicios de un profesional que nos ayude a encontrar las herramientas necesarias para empoderarnos y tomar las riendas de nuestra propia vida al 100%.
Actualmente, puedes acceder a los mejores psicólogos y psiquiatras gracias al seguro de salud. A continuación, abordamos algunos de los principales beneficios de la terapia psicológica online.
Deja más tiempo para otras cosas
Cuando acudimos a una clínica de psicología presencialmente, no solo tenemos que reservar tiempo para la sesión, sino que también debemos hacerlo para los desplazamientos de ida y de vuelta. Por ello, realizar sesiones de terapia online te dejará más tiempo para otras actividades y ocupaciones, ya que no tendrás que desplazarte hasta un gabinete. Al contrario, podrás hacerlo desde tu propia casa.
Refuerza el anonimato
Aunque tu psicólogo siempre debe garantizar tu anonimato, es cierto que la terapia online protege en mayor medida tu privacidad, puesto que al hacerla desde casa, nadie que tú no quieras se enterará de ello. En este sentido, la terapia online refuerza el anonimato del paciente, ya que este no tiene que pasar por una sala de espera ni interactuar con el personal administrativo o de recepción.
Es accesible desde cualquier lugar
Gracias a las posibilidades que nos brindan las nuevas tecnologías, puedes realizar tus sesiones de terapia desde cualquier lugar y en cualquier momento. Para ello, solo tendrás que disponer de un dispositivo electrónico como una tablet, un smartphone o un ordenador y conexión a internet.
Se contruye sobre la confianza
El nivel de confianza que se establece en una consulta online es exactamente igual que el que se construye durante las sesiones presenciales. Lo mismo sucede con la responsabilidad entre el profesional y su paciente. Además, al hacer las sesiones desde un lugar seguro como nuestra propia casa, todavía se acentua más la sensación de confianza y confort con respecto al psicólogo.
Facilita el acceso a las personas con movilidad reducida
Uno de los principales beneficios de la terapia psicológica online es que es más accesible para las personas con movilidad reducida. En este sentido, es la opción perfecta para personas con discapacidades motrices y personas mayores que tienen dificultades para desplazarse autónomamente.
Tiene la misma eficacia
Aunque la terapia psicológica se realice a distancia, esta variable no tiene ningún tipo de repercusión en su efectividad. Por esta razón, los beneficios de la terapia serán los mismos tanto si se hace presencial como telemáticamente.
Abre diferentes vías de comunicación
En algunos casos, la realización de terapia de forma online también abre otras posibilidades de comunicación. Así, por ejemplo, algunos pacientes encuentran en el correo electrónico una buena vía para expresar sus propios sentimientos sin dificultades.
Siempre puedes hablar en tu lengua
Si vives en un país extranjero, gracias a la terapia online podrás acceder a los servicios de un profesional que hable tu mismo idioma y entienda tu propio contexto cultural. De este modo, se facilita la expresión de sentimientos y emociones, que se vuelve más fluida y directa.
Cuáles son los motivos por los que comenzar a hacer terapia
Los motivos por los que podemos realizar un proceso terapéutico a través de la terapia psicológica son múltiples y dependen, fundamentalmente, de la percepción y las necesidades de cada persona. A veces, acudimos al psicólogo porque hemos sufrido una pérdida, la muerte de un ser querido o una ruptura amorosa, por ejemplo. En cambio, otras personas acuden a los servicios de un profesional de la psicología porque están enfrentando cambios en su vida y necesitan algún tipo de soporte emocional.
Otras personas acuden al psicólogo para aprender a manejar sus emociones o para evitar los pensamientos negativos y dañinos que recurrentemente las acechan. En otras ocasiones, las personas acuden a terapia para superar un temor o para recuperar la motivación con relación a aquellas personas o actividades que previamente las llenaban.
Además, hay personas que acuden a terapia porque se sienten solas o no son capaces de establecer vínculos afectivos de una forma sana. En cada caso, las sesiones de terapia adoptan unos u otros caminos, con el objetivo de que la persona se recupere emocionalmente y sea capaz de enfrentar su situación personal de la mejor manera posible.
En cualquier caso, hay personas que acuden al psicólogo porque sienten la necesidad de hablar con alguien. Para acudir a terapia, no hace falta que algo malo nos suceda o sentirnos mal con nosotros mismos o nuestra vida. Por el contrario, las sesiones de terapia pueden ser un espacio de gestión y regulación emocional adecuado para atravesar el día a día de una forma sana y enriquecedora.