El cambiador para el bebé es un elemento que no debería de faltar dentro de nuestro mobiliario infantil ya que nos facilita la tarea más fácil a la hora de cambiarlo de ropita o de pañal. Es importante darle ese valor ya que muchos de ellos nos ofrecen la ventaja de realizar esta tarea de pie, sin tener que doblar el cuerpo y no sufrir de dolores de espalda.
Lo ideal es que sea práctico con todo tipo de componentes, para que no pueda faltar el tener que echar mano de lo que haga falta, impermeable o de lavado fácil y dónde el bebé se sienta cómodo y seguro, con espacio suficiente.
Clases de cambiadores
Cambiador acolchado
Muchos de ellos nos dan acceso para poder colocarlos sobre cualquier superficie, nos permiten ser muy cómodos con su sistema de acolchado para la comodidad del bebé. Muchos vienen con fundas impermeables o de algodón con posibilidad de lavarse fácilmente en lavadora.
Cambiador con bañera
Es el tipo de cambiador que hemos visto toda la vida. Consiste en tener encima de la bañera el propio cambiador para que el mueble sea mucho más recogido, además muchos de ellos incorporan una bandeja inferior para que guardes su ropita o pañales.
Cambiador de pared
Se ofrece este tipo de mueble para casas con espacio reducido, son cambiadores que se desacoplan y acoplan hacia la pared y con todas las medidas de seguridad. Pueden soportar hasta 15 kilos del peso del bebé, con un sistema cómodo de acolchado e incluso algunos tienen algún tipo de pequeño almacenamiento para nuestros enseres.
Cambiador de viaje
Este tipo de cambiador nos permite poder llevarlo a cualquier lugar. Es plegable y algo acolchado e incluso algunos vienen con una pequeña almohada para que la cabeza del bebé esté cómoda. Nos permiten colocarlo en zonas que no están demasiados limpias y así poder tenerlo a mano en todo momento.
Cambiador desechable
Son los famosos empapadores que tienen muy buena utilidad para cambiar a los niños en cualquier lugar. Son de usar y tirar, calentitos y acolchados y son ideales para poder llevar a cualquier lugar, sin que ocupen un gran espacio. Tienen muy buena demanda y por lo tanto lo venden en muchos establecimientos de primera mano.
¿Cuál es el perfecto?
Todo dependerá de las necesidades de cada padre o madre. Lo más normal es tener más de un cambiador para diferentes necesidades, uno fijo y otro para poder llevar a dónde más lo necesites.
El tipo de cambiador para casa dependerá de nuestras obligaciones, si tienes poco espacio el ideal sería el que se despliega de la pared o el que viene encima de la bañera. Yo siempre he utilizado uno portátil para cambiar al bebé encima del sofá o de la cama, que incluso usaba para llevar fuera, mi problema era el espacio, es lógico, pero me hubiese hecho falta un lugar donde no tuviera que inclinarme y forzar mi espalda, lo hubiese agradecido mucho.
Otros padres dependerán también de las medidas y la comodidad del cambiador. Para niños de menos de un año se necesitará uno con medidas desde los 40cm de ancho hasta los 65cm de altura, a partir de año sus medidas aumentarán desde los 60cm de ancho hasta los 80cm de largo.
Y si quieres que se supere en sus medidas de seguridad, siempre buscaremos aquellos con unos bordes de seguridad permitidos para que el niño no se lastime o que lleven un sistema antivuelco. Lo que sí es práctico es que al menos sean cómodos, calentitos, impermeables y con piezas de algodón para poder lavar fácilmente.