Nos encanta que llegue esta época del año. Porque tenemos buen tiempo, por regla general, llegan las esperadas vacaciones y nos podemos ir a disfrutar de la playa. Algo que siempre entra en nuestros planes y más, si tenemos niños. Pero a veces no nos dejan disfrutar tranquilos como sucede con el piojo de mar.
Aunque creas que se trata de un insecto, no, porque hablamos de un pequeño crustáceo que puede acarrear diversos problemas en nuestra piel, sobre todo en la de los más pequeños. Así que, debes tener en cuenta una serie de recomendaciones por si tienes la mala suerte de encontrarte con ellos.
Qué es el piojo de mar
¿Has escuchado hablar sobre el piojo de mar? Pues debes conocerlo cuanto antes para detectarlo y poder prevenirlo, en la medida de lo posible. Podemos definirlo como un crustáceo, como antes hemos hecho, o bien como un parásito. Porque lo vamos a encontrar en diferentes tipos de peces. Ya que suelen habitar tanto en sus mucosidades como en su sangre. Aunque antes solo se podían ver en las aguas más cálidas de la zona del Caribe, han llegado también a la parte del Mediterráneo.
Tiene un cuerpo pequeño, que está formado por una especie de caparazón. Aunque en algunos casos puede haber alguna especie que llegue a los 4 centímetros. Aún así se suelen camuflar de una manera muy rápida, pero eso sí, su naturaleza está destinada a morder y por eso cuando lo hacen en una persona, causarán gran daño.
Qué hacer si le pica un piojo de mar al niño
Tienes que saber que la picadura estos parásitos produce enrojecimiento, quemazón y por lo tanto también picor y en general son bastante molestas. También se puede ver cómo la zona afectada comienza a hincharse ligeramente, lo que no habrá lugar para la duda. Es cierto que no suele ser frecuente, pero en casos más graves o que no se tratan sí que pueden aparecer síntomas como el dolor de cabeza e incluso fiebre o náuseas.
Así que, cuando nos damos cuenta de ello, lo mejor es ir a la ducha y lavarnos bien con agua dulce, además de cambiarnos de bañador. Hay que decir que el agua dulce no se lleva bien con este piojo, así que es uno de los mejores remedios inmediatos. Luego, acudiremos al médico para que nos recete una pomada o antibióticos, según cada caso. Pero a grandes rasgos, podemos decir que es necesario no ser alarmistas aunque sí es cierto que acudir al médico siempre es lo mejor para que de este modo, los síntomas se vayan más rápido.
En algunas ocasiones recurrimos a los remedios caseros. Uno de ellos es aplicar frío o un poco de vinagre. Pero lo cierto es que ninguno nos asegura que sean realmente efectivos. Además, tampoco sustituyen la opinión del experto. De manera que ya sabes: contacta con tu médico pide la ayuda del farmacéutico si no tienes la primera alternativa.
Qué no hacer ante este tipo de picaduras
Aunque sea complicado, lo mejor es evitar rascarse. Porque si comenzamos a rascar, podemos hacernos varias heridas y eso puede dañar más la piel, hacer que sangre y que llegue una posible infección. De manera que el actuar rápido siempre será la mejor alternativas para que el pequeño, o la persona en general, no sufra más de la cuenta. Tampoco debes alarmarte demasiado.
Tal y como hemos comentado, es cierto que estamos ante algo incómodo, pero no reviste mayor problema. Tan solo en casos puntuales o que pueda dar lugar a alergias, entonces sí que los síntomas se intensificarán. Pero con una pomada, que te recetará tu médico, tendrás todo lo necesario para calmar el picor y esa quemazón tan desagradable. Es habitual que, tras el mordisco, comiencen a aparecer los síntomas mencionados. Aunque a veces tardan un poco más. De igual manera, seguiremos los pasos indicados anteriormente: ducha en agua dulce, cambio de bañador y acudir al médico.