Ahora que eres mamá y te pasas mucho tiempo observando a tu bebé descubrirás que a veces, mientras duerme, tiembla, hace movimientos extraños e involuntarios en cara, brazos o piernas. Estas son las llamadas mioclonías del sueño en bebés y niños unas convulsiones son muy habituales. Los adultos también las padecemos, pero no de una manera tan frecuente.
En este artículo te comentaremos por qué se producen, cuáles pueden ser sus orígenes, si debes preocuparte o no, y hasta cuándo es más o menos normal que se produzcan. Con todo ello esperamos tranquilizarte y que la próxima vez que tu hijo tiemble no sientas tanta intranquilidad.
Micolonías, o cuando tu hijo tiembla cuando duerme
Si queremos definir las mioclonías neonatales del sueño, serían como convulsiones y contracciones musculares bruscas y breves, de forma esporádica y asimétrica. Estas suceden cuando el bebé duerme, se manifiestan a partir de las primeras semanas de vida y van desapareciendo hacia el tercer mes. Rara vez llegan a los 7 meses de edad.
Estas convulsiones no hacen daño a su salud, no tienen consecuencias negativas o patológicas en el desarrollo neurológico y psicomotor del bebé. En realidad son pequeños sobresaltos que no duran más de 15 a 20 segundos. Se cree que su origen es genético, ya que suele haber antecedentes familiares. Curiosamente se da más en niños que en niñas.
Las mioclonías provienen del sistema nervioso central, pero como hemos dicho no tienen componente patológico alguno. Se observan en el momento en el que el bebé está en la quinta etapa del sueño, la fase REM, cuando hay más actividad cerebral.
Consejos para madres que sus hijos tiemblan
A veces las mioclonías neonatales del sueño pueden confundirse con otras patologías, por lo que vamos a darte una serie de consejos, de manera que luego puedas referirle al pediatra lo que observas en tu hijo cuando tiembla ya así pueda tener un diagnóstico más certero. Y recuerda, que si los temblores se presentan con otros síntomas, como rigidez en las extremidades o si duran más de 30 segundos, entonces debes llevarlo al médico lo antes posible.
Para que tu bebé descanse al 100% durante el sueño procúrale un ambiente tranquilo, tanto en la hora de la siesta como por la noche. Los ruidos pueden provocar estos sobresaltos. Para quedarte tranquila, observa si despierto también tiene estos espasmos. Cuando veas que tiembla tómale la temperatura, por si tuviera fiebre. También puedes grabarlo con el móvil, para que el pediatra pueda ver lo que sucede. Esto ayudará con el diagnóstico. Y sobre todo, ten un poco de paciencia, las mioclonías se suelen resolver de manera espontánea.
Aunque hablamos de los espasmos en bebés, por ser los más frecuentes niños que tiemblan antes de dormir, son mioclonía nocturna o espasmos musculares. Este es un trastorno que ocurre durante el sueño cuando la persona tiene la sensación que se está cayendo o sin equilibrio. Sucede también de adulto, cuando los brazos y piernas se mueven involuntariamente justo antes de quedarse dormido, como si fueran espasmos musculares.
Otras patologías que se pueden confundir
Hay ciertas patologías con las que puedes confundir los temblores de tu hijo mientras duerme. Pero estas son algo totalmente distinto. Una de ellas, es también benigna, es el llamado síndrome de movimientos rítmicos del sueño o movimientos periódicos de las piernas.
Si estos movimientos se dan durante la lactancia, sería la mioclonías del lactante. La diferencia es que se inician a partir de los 3 meses y pueden durar hasta los 2 años, más o menos. Estos movimientos afectan a la parte superior del cuerpo y suceden cuando el niño está despierto.
La epilepsia, son contracciones paroxísticas focalizadas o generalizadas del cuerpo que, por lo general, se inician a partir de los 6 meses . Es muy raro que haya ataques epilépticos antes y, estas sí conllevan un daño cerebral. Además los bebés y niños quedan somnolientos tras la convulsión. La presencia de problemas metabólicos o una reacción a la ingesta de algunos medicamentos también puede causar espasmos.