Si estás en la recta final del embarazo, es normal que sientas cierta incertidumbre. Incluso si ya has sido mamá antes, sabrás que cada embarazo y cada parto son diferentes, por lo que esa inquietud está más que justificada. En este sentido, queremos hablarte sobre las 24 horas antes del parto.
Quizá algunas de las cosas que te digamos ya las sabrás, pero lo que importa es que las recuerdes para que puedas estar totalmente preparada para ese momento especial. Las últimas 24 horas antes de dar a luz son cruciales y pueden estar llenas de emociones y preparativos. Queremos ser tu guía para estas horas tan importante y especiales en tu vida.
Reconoce las señales de parto
Lo primero en las 24 horas antes del parto es reconocer la señales de que se está acercando el momento. Por eso, queremos darte algunas indicaciones para que así, si te estás acercando mucho al momento esperado, podrás reconocerlo más fácilmente:
- Contracciones regulares: las contracciones uterinas regulares que se vuelven más intensas y frecuentes son un signo claro de que el parto se acerca.
- Pérdida del tapón mucoso: puede notar una secreción mucosa que indica que el tapón mucoso se ha desprendido. Esto a menudo ocurre días o incluso semanas antes del parto.
- Rotura de membranas: si sientes que se ha roto la bolsa de aguas y experimentas una fuga de líquido amniótico, es hora de contactar a tu médico.
- Dolor en la espalda baja: muchas mujeres sienten dolor en la espalda baja antes de que comiencen las contracciones regulares.
- Cambios cervicales: tu cuello uterino puede comenzar a dilatarse y borrar en las semanas o días previos al parto. Tu médico puede decirte esto en un examen cervical.
Estos signos te estarán avisando de que el momento de tener a tu bebé en brazos está cada vez más cerca. Es normal que sientas gran emoción, ¡y no es para menos!
Cuáles son los preparativos las 24 horas previas al parto
Ahora que ya sabes identificar las señales de parto, ahora toca saber cuáles son los preparativos que debes realizar para que no te falte de nada y sobre todo, para que sientas control sobre todo lo que está sucediendo. Sentir control no es fácil porque no sabes cómo pasará todo, pero al hacer los preparativos te ayudará a tener calma y tranquilidad ante el proceso tan maravilloso que se avecina.
Comunícate con tu médico
Si experimentas contracciones regulares o cualquier otra señal de que el parto se acerca, comunícate con tu médico o partera de inmediato. Ellos te guiarán sobre cuándo es el momento adecuado para dirigirte al hospital o centro de parto.
Haz tu bolsa de hospital antes del parto
Asegúrate de tener una bolsa de hospital lista con todas las cosas esenciales que necesitas para ti y tu bebé. Esto incluye ropa cómoda, artículos de higiene personal, documentos médicos, ropa para el bebé y cualquier otro artículo que hayas decidido llevar.
Piensa en cómo irás al hospital
Si no tienes un coche o no puedes conducir, coordina con anticipación el transporte al hospital o centro de parto. Tener un plan de respaldo en caso de que tu pareja o acompañante no esté disponible es una buena idea. Esto te dará tranquilidad en el momento más importante de tu vida, ¡es un plan B muy importante!
Comida y bebida
Mantén una ingesta adecuada de alimentos y líquidos, pero evita comidas pesadas y grasosas que podrían causarte molestias durante el parto. Las comidas ligeras y equilibradas son ideales para mantener tu energía y que en el parto no tengas ningún problema derivada de una digestión pesada.
Descanso antes del parto
Intenta descansar tanto como sea posible. Sabemos que la emoción puede dificultar el sueño, pero estar descansada te dará la energía que necesitas durante el parto. Si no te duermes, al menos emplea el tiempo para meditar, hacer respiraciones profundas y encontrar la calma que tanto tu cuerpo como tu mente necesita.
Cómo manejar el estrés y la ansiedad
Sabemos que 24 horas antes del parto pueden ser muy intensas y que te cause estrés y ansiedad. Por esto, a continuación vamos a recomendarte algunas estrategias sencillas pero potentes para que puedas mantener al estrés y a la ansiedad a raya.
Respiración y meditación
Como te hemos dicho en el punto anterior, la respiración profunda y la meditación pueden ayudarte a mantenerte calmada y centrada en ti. Practica la respiración profunda para relajarte cuando sientas tensión.
Habla con tus seres queridos sobre tu parto
Compartir tus sentimientos y preocupaciones con un ser querido puede aliviar la carga emocional. Puede ser tu pareja, un amigo cercano o un miembro de la familia.
Mantén un diario de embarazo
Llevar un diario de tus pensamientos y emociones puede ser una forma terapéutica de procesar tus sentimientos. Anota lo que sientes y lo que estás esperando con respecto al parto.
Además, cuando ya haya nacido tu bebé y pasen los meses y los años, te gustará volver a releer todas esas líneas… incluso cuando tu hijo/a sea más mayor podrás enseñárselo y será un momento especial para ambos.
Ejercicios suaves
Hacer ejercicio suave como yoga prenatal o caminatas cortas puede liberar endorfinas, lo que puede ayudar a mejorar tu estado de ánimo. No es necesario que hagas demasiado, simplemente algunos movimientos o solo caminar, será suficiente.
Apoyo de tu equipo de parto
Durante las últimas 24 horas antes del parto, es fundamental contar con el apoyo de tu equipo de parto. Esto puede incluir a tu pareja, familiares o amigos de confianza, así como al personal médico. Lo que importa es que tengas en cuenta quienes serán estas personas que estarán a tu alrededor en estos momentos tan cruciales. Una vez que lo tengas claro, ten presente los siguientes puntos.
Comunicación abierta con ellos
Mantén una comunicación abierta y clara con tu equipo de parto. Comparte tus necesidades y deseos para el parto, y asegúrate de entender el plan de atención médica. Recuerda que tu equipo de parto los eliges tú… son personas importantes para ti.
Apoyo emocional antes y después del parto
Tu equipo de parto está ahí para darte apoyo emocional. Permíteles estar presentes y ayudarte en lo que necesites. No quieras hacerlo tú todo sola, aunque el parto es un proceso natural necesitarás estar atendida y tus seres queridos estarán encantados de hacerlo, no le prives de eso.
No dejes de aprender sobre el parto
Pregunta a tu equipo de parto sobre cualquier pregunta o preocupación que tengas. La educación continua es clave para sentirte segura y empoderada.
Descansos para tu equipo de parto
Recuerda que tu equipo de parto también puede necesitar descansos. Permíteles tomar un respiro para recargar energías… El parto puede ser un proceso largo, por lo que ellos necesitarán recargarse para poder seguir estando a tu lado cuando los necesites con la energía a tope.
Escucha a tu cuerpo
Durante estas últimas 24 horas, escuchar tu cuerpo es fundamental. Las contracciones pueden volverse más fuertes y frecuentes, y tu cuerpo te indicará cuándo es el momento de dirigirte al hospital o centro de parto.
ero para hacerlo, debes aprender a escuchar a tu cuerpo, no es algo que estemos acostumbrados a hacer y la realidad es que es algo que todos deberíamos aprender, no solo en el embarazo, si no también a nivel nutricional o emocional.
Pero en este caso, es importante que escuches a tu cuerpo para saber todo lo que te está diciendo durante las 24 horas previas al parto. Para ello, los puntos que te comentamos a continuación son muy importantes que los conozcas desde ahora mismo.
Controla el tiempo entre contracciones
Si tus contracciones son regulares y ocurren cada cinco minutos durante al menos una hora, es un buen momento para ir al hospital o comunicarte con tu médico si estás planeando un parto en casa o en un centro de parto.
Observa el nivel de dolor
Si el dolor de las contracciones es intenso y difícil de manejar, es otro signo de que el parto está avanzando y que es hora de buscar atención médica.
Escucha a tu matriz
Tú conoces tu cuerpo mejor que nadie. Si sientes que algo no está bien o que algo ha cambiado, no dudes en comunicarte con tu médico de inmediato.
No tengas miedo a pedir ayuda para el parto
No importa cuánto te hayas preparado, el parto puede ser impredecible. No tengas miedo de pedir ayuda si sientes que algo no está bien. Tu equipo de parto está ahí para garantizar tu seguridad y la de tu bebé.
En este sentido, no te conformes con menos, si sientes que algo no va como debería, aunque creas que es una tontería, no te lo calles, es importante que lo comuniques inmediatamente a tus familiares y equipo médico para que buscan la solución que necesites lo antes posible.
Las 24 horas previas al parto son un período lleno de emoción y preparativos. Aprovecha este tiempo para cuidarte a ti misma, comunicarte con tu equipo para ese momento y escuchar a tu cuerpo. Con el apoyo adecuado y la preparación, estás lista para enfrentar el parto con confianza y valentía.