El embarazo es un estado asombroso de la mujer, se crea vida. Durante el embarazo se experimentan las contracciones de Braxton Hicks que son como señales del cuerpo para advertirte de que se está preparando para el gran día. Pero, ¿qué sucede cuando estas contracciones parecen llegar con más frecuencia de lo que esperabas?
Para que puedas entender todo sobre las contracciones de Braxton Hicks vamos a explicarte detalladamente por qué ocurren y sobre todo, cómo diferenciarlas de las contracciones de parto real y cómo gestionarlas para un embarazo saludable.
Las contracciones de Braxton Hicks
Las contracciones de Braxton Hicks, también conocidas como contracciones falsas, son ocurren durante el embarazo, sobre todo al final del mismo. Reciben su nombre del médico británico John Braxton Hicks, quien las describió en el siglo XIX. Estas contracciones son esencialmente un simulacro que tu útero realiza para prepararse para el parto real.
Aunque pueden comenzar a aparecer desde el segundo trimestre, es más probable que las sientas en el tercer trimestre. Estas contracciones son generalmente indoloras o causan una ligera molestia, aunque su intensidad puede variar. Son una parte normal y necesaria del proceso de preparación para el parto.
La frecuencia de las contracciones de Braxton Hicks
En ocasiones, durante el embarazo, las contracciones pueden aparecer con mucha frecuencia, algo que puede confundir a la mujer embarazada, creyendo que el parto puede llegar antes de tiempo. A continuación vamos a explicarte qué significa que las contracciones de Braxton Hicks ocurran de forma frecuente:
- Prácticas en el músculo uterino: las contracciones de Braxton Hicks son como el gimnasio para tu útero. Ayudan a fortalecer y preparar el músculo uterino para las contracciones del parto real.
- Actividad física: cuando se camina o se realizan actividades físicas esto estimula las contracciones. Tu cuerpo reacciona al movimiento y al esfuerzo físico al aumentar la actividad uterina.
- Hidratación adecuada: la deshidratación puede aumentar la frecuencia de las contracciones de Braxton Hicks. Beber suficiente agua es esencial para mantener tu cuerpo funcionando de manera óptima.
- Estrés y ansiedad: tu estado emocional también puede influir en la frecuencia de estas contracciones. El estrés y la ansiedad pueden desencadenar la liberación de hormonas que afectan el útero.
- Actividad sexual: el orgasmo puede desencadenar contracciones uterinas, y durante el embarazo, estas contracciones pueden ser más pronunciadas y frecuentes.
- Embarazo múltiple: si esperas gemelos u otros múltiples, es posible que sientas contracciones de Braxton Hicks con más frecuencia debido a la mayor distensión uterina.
Distingue las contracciones de Braxton Hicks con el parto real
Una de las principales preocupaciones cuando experimentas contracciones de Braxton Hicks muy seguidas es asegurarte de que no se trate de un parto prematuro. Aquí tienes algunos consejos para diferenciarlas:
- Regularidad: las contracciones de Braxton Hicks son irregulares en términos de tiempo y no siguen un patrón constante. Las contracciones del parto real se vuelven más regulares con el tiempo.
- Intensidad: las contracciones de Braxton Hicks solo causan una ligera molestia. Durante el parto real las contracciones son más intensas y dolorosas, y su intensidad aumenta con el tiempo.
- Ubicación: las contracciones de Braxton Hicks son localizadas en el abdomen y las del parto real se notan en todo el útero y pueden irradiar hasta la espalda.
- Duración: las contracciones de Braxton Hicks son cortas, no suelen llegar al minuto y las del parto real son más largas pudiendo sobrepasar el minuto o más.
- Cambio con el movimiento: cuando se tienen contracciones de Braxton Hicks se alivian cambiando de posición y cuando se tratan del parto real son intensas en cualquier posición.
Cómo sobrellevar las contracciones de Braxton Hicks frecuentes
Si te has notado que tienes contracciones de Braxton Hicks de forma frecuente, entonces te interesará conocer algunas estrategias para sobrellevarlas correctamente y que no te supongan una molestia demasiado continua. Toma nota:
- Descansa: descansar es la clave… si son frecuentes siéntate o túmbate sobre tu lado izquierdo para aliviar la presión sobre la vena cava inferior y mejorar el flujo sanguíneo al útero y a tu bebé.
- Bebe agua: la hidratación es importante para que no se desencadenen las contracciones por deshidratación.
- Relájate: relájate con técnicas como la respiración profunda o la meditación.
- No te aguantes la orina: si tienes ganas de hacer pipí no te aguantes porque si se te llena la vejiga podría presionarte el útero.
- Cambia la postura: de tanto en tanto, ve cambiando la posición de sentada a tumbada o de pie para aliviar las contracciones.
- Habla con tu médico: hablar con tu médico si las contracciones son seguidas o dolorosas es importante para descartar un parto prematuro.
¿Cuándo debes buscar ayuda médica?
En el embarazo si hay alguna preocupación siempre hay que hablar con un facultativo médico para comprobar que todo va bien. Pero si las contracciones de Braxton Hicks persisten o te preocupan, es vital comunicarte con tu médico.
Aunque son en su mayoría inofensivas, un aumento repentino en su frecuencia podría estar relacionado con problemas subyacentes que requieren atención médica. Algunas señales de alarma son:
- Contracciones regulares y cada vez más intensas.
- Contracciones acompañadas de sangrado vaginal o la liberación de líquido amniótico.
- Contracciones que persisten a pesar del descanso, la hidratación y el cambio de
- posición.
Contracciones antes de la semana 37 de embarazo.
Ante cualquiera de estas señales no dudes en acudir a tu médico para poder comprobar tu estado de salud y la de tu bebé.
Las contracciones de Braxton Hicks frecuentes en el embarazo múltiple
Si estás esperando gemelos, trillizos u otros múltiples, es importante comprender cómo las contracciones de Braxton Hicks pueden variar en comparación con un embarazo de un solo bebé.
En estos casos, es posible que sientas estas contracciones con más frecuencia y mayor intensidad debido a la mayor distensión uterina. La multiplicidad del embarazo ejerce una presión extra en el útero, lo que puede hacer que las contracciones sean más notorias.
Si experimentas un embarazo múltiple, asegúrate de seguir de cerca las recomendaciones de tu médico y comunica cualquier cambio en las contracciones para garantizar un seguimiento adecuado.
La importancia del apoyo emocional
A lo largo del embarazo, las contracciones de Braxton Hicks pueden desencadenar emociones diversas, desde la anticipación hasta la ansiedad. Compartir tus preocupaciones y emociones con tu pareja, familiares o amigos cercanos puede aliviar el estrés y la ansiedad relacionados con las contracciones.
También puedes pensar en unirte a grupos de apoyo para embarazadas, donde puedes conectarte con otras mujeres que están pasando por experiencias similares. La atención prenatal que incluye el apoyo emocional puede contribuir significativamente a tu bienestar general y a tu capacidad para manejar las contracciones de Braxton Hicks de manera efectiva.
Recuerda que tu bienestar emocional es igual de importante que tu bienestar físico durante el embarazo, y contar con un sistema de apoyo sólido puede marcar una gran diferencia en tu experiencia.
Las contracciones de Braxton Hicks y la preparación para el parto
Las contracciones de Braxton Hicks no solo son una respuesta natural de tu cuerpo al embarazo, sino que también pueden servir como una oportunidad para prepararte para el parto. A medida que las sientas con mayor frecuencia, puedes utilizarlas como una oportunidad para practicar técnicas de respiración y relajación que serán útiles durante el trabajo de parto real.
Una opción es asistir a clases de preparación para el parto, porque allí te pueden enseñar a prepararte para el momento del parto con diferentes estrategias concretas que se adapten a ti.
Aprovecha esta fase de preparación para aumentar tu confianza y reducir cualquier ansiedad que puedas tener sobre el momento que esperas. Recuerda que estás desarrollando habilidades que te serán de gran ayuda cuando llegue el momento de dar a luz.
Después del parto, ¿también ocurren las contracciones?
Las contracciones de Braxton Hicks no terminan necesariamente después del parto. Después de dar a luz, es posible que experimentes contracciones posparto conocidas como «entuertos» o «contracciones uterinas posteriores». Estas contracciones son el resultado del útero que se contrae y se reduce a su tamaño normal después del parto.
Aunque pueden ser incómodas, especialmente en el período inmediatamente posterior al parto, son una parte natural del proceso de recuperación. Estas contracciones suelen ser más frecuentes en madres que han tenido múltiples partos y tienden a disminuir en intensidad y frecuencia con el tiempo.
Si tienes preocupaciones sobre las contracciones posparto, no dudes en discutirlas con tu profesional de la salud, quien puede brindarte orientación y alivio si es necesario.
Las contracciones de Braxton Hicks son una parte necesaria y a menudo desafiante del viaje del embarazo. Al comprender por qué ocurren, cómo diferenciarlas de las contracciones del parto real y cómo llevarlas mejor, puedes disfrutar por este período con confianza y tranquilidad.
Además, aprovecha esta etapa para prepararte emocional y físicamente para el emocionante día en que conocerás a tu bebé. No olvides que tu viaje es maravilloso, y cada contracción es un recordatorio de la increíble transformación que tu cuerpo está experimentando mientras se prepara para dar la bienvenida a la nueva vida.
Tu viaje hacia la maternidad es especial, y las contracciones de Braxton Hicks, aunque a veces persistentes, son solo una pequeña parte de la increíble aventura que estás viviendo. Disfruta de cada momento y prepárate para dar la bienvenida a tu bebé con amor y alegría.