Los juegos clásicos e infantiles no se pueden perder nunca, a pesar de que los años vayan pasando. Ya que muchos se están perdiendo por el camino debido a la tecnología. Así que, nos hemos acordado del balón prisionero y es el momento de dejarnos llevar por él, porque los peques disfrutarán como nunca de un juego así.
Tiene varias versiones, es cierto, pero seguro que aún así te acordarás y querrás revivirlas todas. Por eso, te dejamos con todo lo que necesitas saber del juego conocido como el balón prisionero, ya que seguro que algunos recuerdos se apoderarán de tu mente. ¡Déjate llevar por esa pincelada de nostalgia!
¿Cómo se llama balón prisionero?
¿Cómo se juega al balón prisionero?
Así que, ya que lo hemos presentado tan solo queda saber cómo se juega. En primer lugar, hay que formar dos equipos y tener un balón a mano. No hay puntos sino personas que eliminar, así que, hay que tener buena puntería. Cada campo se puede dividir en dos partes para poder colocar en la parte trasera a los ‘prisioneros’.
Da comienzo el juego y uno de los jugadores lanza el balón hacia el equipo contrario. Este, tiene que cogerlo y el que lo lanzó se convierte en prisionero. Si el balón no se sujeta, pero sí le ha rozado o dado un golpe a algún jugador, este pasa también de prisionero al campo contrario. Así que, el tema es pillar siempre el balón y sino, que no te roce. Quien más prisioneros tenga, entonces será el equipo vencedor. Recuerda que los jugadores deben estar en movimiento para que así el balón no les toque con tanta facilidad.
Reglas que debes seguir
Ya hemos comentado que, al tratarse de un juego tradicional, las reglas pueden ir variando ligeramente. Tampoco pasa nada por ello, porque lo que se quiere encontrar es la diversión y favorecer el ejercicio físico en los menores. También potencia el compañerismo por regla general, aunque ya sabemos que algunos tienen muy mal perder:
- Cuando un jugador lanza la pelota y otro del equipo contrario la pilla en el aire puede lanzarla de manera inmediata hacia su contrario. Es un acto reflejo perfecto para pillar despistados a sus rivales.
- Puedes hacer el juego más o menos corto: eliminando a todos los del equipo contrario o bien, cuando uno tenga mayoría de ‘prisioneros’ dar por concluido el juego.
- Claro que recordamos que, si al lanzar el balón, te toca y este cae al suelo, no hay quien te salve porque te conviertes en ‘prisionero’.
- Pero ojo, porque si un ‘prisionero’ lanza el balón al equipo contrario, le da a un oponente y este no lo pilla, volverá al juego y dejará de ser ‘prisionero’.
- Pero si con el balón le das a alguien de tu equipo, no debes preocuparte porque no sucede nada. ¡Siempre podemos fallar en algún que otro lanzamiento!
- Si estás de lo más entretenido y no quieres terminar el juego, también hay maneras de hacerlo. Porque si un equipo está todo ‘prisionero’ el juego estaría terminado. Pero hay excepciones, porque se pueden hacer 3 lanzamientos desde esa cárcel o cementerio y si uno de ellos le da a algún jugador contrario, el juego se retoma.
Como ves, no es un juego cerrado sino que las alternativas siempre están sobre la mesa y eso nos encanta. El balón prisionero sigue siendo uno de los grandes valores tradicionales que debes tener en cuenta.