Cada vez más la robótica educativa se está implantando en las aulas, y en las actividades extraescolares que se proponen para los niños y las niñas. Te explicamos en pocas palabras cómo esta rama de la ingeniería aporta creatividad, ya que estimula la curiosidad, programación y resolución de conflicto en los procesos de aprendizaje.
Enseñar robótica a los niños y niñas contribuye al dominio de las habilidades motoras finas, al desarrollo del lenguaje, mejora la memoria y la concentración. Además enseña a trabajar en equipo, lo que favorece la socialización. Como ciencia la robótica conlleva, desde el diseño de la estructura de un robot hasta el desarrollo del código para programar sus funciones.
¿Cómo introducir la robótica educativa en el aula?
De manera previa a introducir la robótica educativa en el aula hay que definir el material y el entorno, número de robots, grupos de alumnos. En las aulas es importante que los niños y niñas tengan espacio suficiente, o no se pierda tiempo buscando material, para asegurar que se cumple el tiempo de cada paso.
Por lo demás la introducción de la robótica es bastante sencilla, porque implica una forma de aprendizaje activo fácil de mantener, y muy estimulante para los niños y las niñas. Los paquetes de robótica que se utilizan han sido diseñado para que resulten muy intuitivos a los alumnos, y alumnas. Todas las piezas del programa, incluido el software, funcionan a un nivel muy sencillo. Hasta los materiales físicos son muy manejables para que los niños y niñas trabajen de manera autónoma.
El profesor o profesora debe exponer el propósito de la actividad, las bases, suposiciones, ideas que se pretenden enseñar y hacer continuas preguntas y recordatorios para que los niños las mantengan en su mente. Los niños deben convertirse en solucionadores de esos pequeños problemas que (seguro) van a surgir, y no esperar a que sea el profesor o profesora los solucione.
Recursos para llevar la robótica educativa al aula
Los profesores y profesoras tienen distintas herramienta para enseñar robótica a sus alumnos. Estas herramientas casi siempre son digitales, como juegos y aplicaciones para aprender a programar. Ya hemos hablado en otros artículos como la gamificación, como herramienta de aprendizaje, cada vez se introduce más en las aulas.
Lo cierto es que hay robots educativos de distintas formas y niveles para niños y niñas de todas las edades. Se trata de una serie de paquetes con los que los niños pueden construir con sus propias manos sus robots. Algunos de estos pack permiten más creatividad en cuanto a la forma, otros dan menos margen para la programación de los movimientos, o acciones, y otros están más centrados en que el alumnado desarrolle las competencias de programación.
Gracias a estos paquetes que ya vienen, casi montados, un profesor no necesita saber demasiado de robótica. Así cambia el rol de experto. La idea es que la robótica educativa se convierta en una herramienta que ayude entender mejor las materias. A la vez que los niños y niñas se habitúan a ver estos procesos.
Ejemplos de robots educativos
Te vamos a nombrar algunos de los robots más conocidos y utilizados en los colegios e IES españoles, pero seguro que puedes encontrar algunos más en Internet. Lo más importante es que fomenten el aprendizaje participativo e impulsen el conocimiento entre los niños. Hay opciones para todos los niveles y edades.
- Robot Sphero Mini, de Sphero Edu. Un robot con giroscopio y acelerómetro de tamaño reducido y luces LED que se iluminan mientras se mueve. Tiene la posibilidad de conducción facial. Es programable, con lo que permite aprender programación.
- Robot Zowi, de BQ, a partir de los 8 años. Los pequeños pueden dar forma con sus piezas, enseñándole a andar e, incluso, bailar. Tiene una placa programable.
- Bee-Bot es uno de los robots educativos más populares por su forma de pequeña abeja. Está pensado para educación Infantil y Primaria. Específicamente, está diseñado para aprender conceptos básicos de programación.
- Mindstorms, de Lego. Es una gama de robots educativos con los que poder practicar el ensamblaje de las piezas para dar forma a su robot y la programación de las acciones que ejecutará.