Las pezoneras es la mejor alternativa para dar uso a la lactancia. Hay madres que tienen muchas dificultades para utilizar la lactancia con su bebé y por ello podrán utilizar unos protectores de pezones de silicona. Detallaremos cómo utilizar las pezoneras de lactancia y cuando es recomendable su uso.
Las pezoneras es una solución eficaz para poder dar el alimento al bebé. Hay quienes opinan que, en vez de solucionar el problema, crea otro problema más en su utilización. No obstante, es un elemento de bajo coste, dónde se recomienda utilizarlo y probar hasta qué punto llega a solucionar este problema.
¿Cuándo se recomienda su uso?
La lactancia puede verse afectada por varios detalles que analizamos a continuación. En este caso es de vital importancia utilizar las pezoneras para que pueda facilitar su mecanismo. Las pezoneras son una especie de tetinas que tienen una composición de látex o silicona. Los profesionales aconsejan que su uso ha de realizarse de forma puntual y en el caso de que haya dudas, se ha de acudir a una matrona para un asesoramiento. ¿Cuándo se recomienda su uso?
- Cuando el bebé está comenzando con una lactancia natural y tiene problemas de agarre. Ocurre generalmente cuando los niños tienen un frenillo lingual corto o cuando han nacido con el Síndrome de Down o son hipotónicos.
- Cuando se ha comenzado con la lactancia y la madre lo está pasando mal, ya sea por el gran dolor que surge de su pezón. Es cuando se padece de pezones doloridos, agrietados o sangrantes, debido generalmente porque el bebé no está succionando de forma adecuada y con su pequeña fuerza provoque esta situación.
- Hay madres que padecen de pezones invertidos, flácidos o planos. Muchas de ellas rechazan intentar en ofrecer la lactancia materna, pero más allá de desistir, se puede intentar el uso de las pezoneras para facilitar el agarre.
- Si se utiliza la lactancia mixta, también hace que el bebé se acostumbre a utilizar lo más práctico, en este caso el biberón. De esta forma, cuando tiene que alimentarse con el pecho lo hará de forma vaga e inconsciente, haciendo que por ello se recurra a las pezoneras para facilitar su alimento.
¿Cómo utilizar las pezoneras?
A parte de la gran utilidad de las pezoneras, hay que destacar que es un artilugio que ha de ser utilizado de forma puntual, ya que los profesionales indican su uso de manera ocasional y se retire lo antes posible. En el momento de uso realizaremos los siguientes pasos:
- Se pueden sumergir las pezoneras en agua tibia durante unos minutos para que se vuelvan más maleables a su uso.
- Para que agarre mucho mejor la pezonera al pezón, se puede impregnar de un poco de leche materna, lanolina, lubricante o agua para hacer que se adhiera con más facilidad.
- Aplicamos unas gotas de leche materna dentro de la pezonera, así se produce bien el sellado y después no se necesitará nada más que apretar un poco, para que se facilite la succión.
- Retuerce el borde de la pezonera para que quede invertida. Hay que colocarla sobre el pezón y centrarla, introduciendo todo lo que puedas del pezón y apretando los bordes hacia abajo.
- Hay que hacer girarla para que los bordes recortados de la pezonera se ajusten a la parte de la nariz y la boca del bebé. También hay que fijarse de que quede un espacio entre la punta del pezón y el final de la tetina, si no es así, probablemente la tetina sea demasiado pequeña.
- Ahora apunta a poder ofrecer la punta de la pezonera hacia la boca del bebé, ayúdalo para que pueda entrar hasta el paladar, cierre la boca y pueda engancharse correctamente.
Las pezoneras son una medida alternativa para casos extremos cuando no se pueda formalizar la lactancia natural. Podemos recurrir a ellas de forma puntual. Otra de las medidas que tenemos que asegurar es mantenerlas siempre bien lavadas para una mejor seguridad.