Es muy recomendable para los adultos jugar con los niños pequeños, sin criticar el juego que están haciendo salvo que sea alguna cosa que no aceptemos que se haga en casa y fomentando la creatividad que tienen los pequeños.
Por ello, hoy os traemos consejos para todos aquellos padres que quieren implicarse en los juegos de sus hijos o para todas aquellas personas adultas que quieran jugar con los niños pequeños de sus amigos o familia.
Consejos para jugar con los niños pequeños
Jugar con los niños pequeños es importante ya que para ellos el juego es una de las actividades fundamentales de su vida. El juego ofrece diversión, entretenimiento, fomenta la creatividad y también puede potenciar los lazos familiares si jugamos juntos.
¿Cómo empezar a jugar con los niños pequeños?
Lo primero que debemos hacer es meternos en el juego del niño, conseguir formar parte de sus juegos implica seguir las reglas del juego no imponer las nuestras (dentro de unos límites por supuesto ya que si jugamos a tirar los jarrones de la abuela seguro que no es un juego divertido para todos). Aquí van algunas recomendaciones:
Debemos participar en el juego sin tratar de controlarlo, debemos proporcionar los elementos necesarios para el juego como por ejemplo algún juguete pero el juego debe desarrollarlo el pequeño. Así favorecemos la imaginación de los niños y podremos aportar en el juego que ya están imaginando o en el que desean jugar.
No tomarnos el juego a risa, para ellos es un juego que va enserio, les gusta y les apetece jugar. Si no nos lo tomamos enserio mejor no participar.
El mundo infantil no es como el adulto, así que para entrar en los juegos de los niños pequeños debemos dejar el juicio adulto atrás y sacar al niño que tenemos dentro. Pensemos qué nos gustaba hacer de pequeños, cómo jugábamos y tratemos de llevar eso al presente. Aceptemos el juego como es. Si una caja es un día un barco y al siguiente es una casa pues imaginemos nosotros también que lo es.
Consejos para no preocuparnos durante el juego
Una zona de juegos propia donde poder jugar sin importar que algo se ensucie o quede desordenado, suele ser una opción muy buena ya que no estaremos preocupados de que ese lugar quede mal y nos podremos centrar en el juego.
Los límites si están permitidos si hay peligro para el niño, para otras personas, para animales o para las cosas de la casa. Por tanto los límites son buenos y hay que establecerlos. Si estamos jugando lo mejor es tratar de encauzar hacia donde va el juego y desviarlo para otro lado menos dañino. Los profesionales recomiendan esta opción antes de la prohibición.
Dejemos las competiciones de lado, es un momento para estar juntos no para rivalizar. Podemos llevar el juego al elogio para fomentar aquellas cosas del juego que creemos son más beneficiosas o favorables. Si por ejemplo surge algún problema animemos a que lo resuelvan y elogiemos después.
Consejo final para jugar con los niños pequeños
Que no sea un día aislado, intentemos sacar hueco casi todos los días de la semana para jugar un rato con ellos. Juguemos a distintos juegos no solo a aquel que nos gusta y dejar el resto de lado.