Para entender qué es esto de la conciliación y qué se espera de una sociedad avanzada, plural e igualitaria te refrescamos algunos conceptos.
Conciliación personal, familiar y laboral garantizada
Se habla de tres segmentos de conciliación, una en la que padres y madres puedan acceder al mercado de trabajo, en igualdad de condiciones, y permanecer en él sin que su situación familiar afecte negativamente a las posibilidades de acceso a puestos de responsabilidad.
A su vez, en esta conciliación los hijos pueden ser cuidados y educados por sus progenitores, incluyendo la conciliación de las madres solteras, y de la misma forma los familiares dependientes sean atendidos, si así lo desean, por sus familiares sin menoscabo de las posibilidades laborales del cuidador, o en la mayoría de los casos cuidadora.
Con la conciliación personal, familiar y laboral se reconoce el derecho a mantener al mismo tiempo una carrera profesional plena y ejercer la posibilidad de cuidado de la familia. Sea este un hombre o una mujer.
¿Cómo se consigue la conciliación familiar?
A pesar de las leyes, los reglamentos y convenios laborales, la auténtica conciliación familiar no es posible si la sociedad, administraciones, sindicatos, empresarios, empresarias, trabajadores y familias no son conscientes de ella y apoyan medidas de igualdad. Además habría que promover la corresponsabilidad sobre la distribución del tiempos y las tareas en las familias, incluyendo a los hijos e hijas de acorde con su nivel de responsabilidad y desarrollo.
Para algunos expertos en el tema la conciliación familiar es un cambio de paradigma. Significa cambiar la mirada y poner los cuidados en el centro del debate político. Estar presentes en la unidad familiar sin poner en riesgo ni la supervivencia económica, ni el desarrollo personal.
La reciente situación de confinamiento y el teletrabajo, en el mejor de los casos ha mostrado la realidad, que conciliar, es decir hacer compatibles dos o más cosas, no es posible en la mayoría de hogares de España. No se pueden llevar a cabo dos tareas que demandan tanto de nosotros, como madres y padres, como un empleo remunerado y los cuidados. Durante el confinamiento los picos de envío de correo electrónico han sido a las 9 de la mañana, se ha adelantado una hora. Además ha habido días con picos desde la medianoche a las 3 de la madrugada, que no estaban presentes antes del brote de Covid-19. Piensa si esto es conciliación o simplemente hacer tu trabajo mientras tus hijos duermen.
Algunas medidas que ayudan a conciliar
A pesar de este panorama negro, o gris oscuro, hay algunas medidas e ideas que nos pueden ayudar a conciliar nuestra vida laboral, personal y familiar. Estas medidas puede que nos la facilite la empresa para la que trabajamos, pero también tenemos que saber pedirlas, y si no es posible, adaptarlas a nuestra propia situación. Nos ayudará mentalmente a mantener un equilibrio y no sentirnos culpables por dejar de atender. Cada cosa a su tiempo.
Los agentes sociales tienen establecido un código de buenas prácticas sobre conciliación de la vida familiar y laboral en las empresas. Este puede servirte de referencia aunque trabajes en una pequeña empresa o seas autónoma. En él aparecen varios ejemplos de horarios competitivos y conciliadores. Habla con tus compañeros y compañeras y distribuiros la tarea. A veces es más fácil conseguirlo de lo que parece.
Infórmate sobre tus derechos como madre y como hija. Y anima a tu pareja y a los hombres de tu trabajo a que usen los permisos de paternidad, que no son solo cuando el niño nace. A las empresas que pongan en marcha medidas de acción positiva para la conciliación dales tu apoyo. Consume sus productos o utiliza sus servicios, se creará así una conciencia positiva sobre la eficacia de la conciliación familiar.