En estos tiempos de pandemia, crear una buena zona de estudios en casa es imprescindible para que los chicos puedan llevar un curso académico lo más apropiado, dentro de las posibilidades. Independientemente de la edad de los niños, todos de alguna manera van a tener que estudiar desde casa. Ya sea porque se produzcan aislamientos temporales, porque tengan edad suficiente como para combinar las clases personales con las virtuales, porque tengan algún problema de salud que les obligue a estar en casa o sencillamente, porque todos deben reforzar los estudios cada día.
En definitiva, cuando tienes hijos en edad escolar en casa, es esencial contar con un espacio apropiado. Pero en estas circunstancias tan especiales mucho más si cabe. Ya no es cuestión de tener un escritorio para que los niños hagan los deberes durante un rato al día. Es que en estos tiempos de Covid-19, es posible que tengan que pasar bastantes horas en su zona de estudios, por ello debe estar perfectamente adecuada a sus necesidades.
Cómo debe ser una buena zona de estudios en casa
Para lograr una zona de estudios en casa, no es necesario realizar una gran inversión económica. Puedes reutilizar una mesa o un escritorio viejo, hacerle algunos arreglos, una mano de pintura y añadir elementos prácticos para hacerlo más eficiente. Eso sí, debes asegurarte de que el escritorio tiene una medida adecuada para el tamaño del niño, de forma que siempre pueda tener los pies apoyados en el suelo. Es preferible ahorrar en ese tipo de muebles, sin descuidar los aspectos importantes, porque donde no debes tener miramientos es en la silla del escritorio.
Es fundamental que la silla sea ergonómica, apropiada para la edad de los niños y preparada para que puedan pasar horas sentados sin sufrir daños en su espalda. Las claves para elegir la mejor silla son, que tenga el respaldo alto, que sea regulable en altura, que el asiento sea redondeado y acolchado y si es necesario, añadir un reposapiés para que las piernas del niño formen un ángulo de 90 grados. Es muy importante evitar que las piernas les cuelguen por no llegar al suelo.
Una vez elegida la silla de escritorio y la mesa de estudios, llega el momento de buscar una buena iluminación. Lo más apropiado es utilizar la luz natural siempre que sea posible. En cualquier caso, elige siempre luz blanca y bombillas de led. Este tipo de iluminación favorece el estudio de los niños, sin cansar ni dañar la vista. Sin olvidar del ahorro económico por el bajo consumo de las bombillas de led.
Materiales de apoyo
Para completar la zona de estudios en casa, puedes incluir todo tipo de materiales de apoyo. Por ejemplo, una forma más clara de explicar ciertas cuestiones es utilizando una pizarra, de forma que además se reduzca el consumo de papel. Puedes crear una zona de pizarra de varias formas, usando una pizarra en sí, aunque es bastante pesada y tendrás que hacer agujeros en la pared para que no se mueva.
Las opciones más sencillas son las siguientes, por una parte, puedes adquirir un vinilo efecto tiza que se pega fácilmente en la pared, incluso si tienes gotelé en las paredes. Por último y nuestra opción preferida, pintar una zona de la pared con pintura efecto tiza. Esta opción es económica y puedes crear una zona de pizarra tan grande como quieras. Además, puedes dar rienda suelta a tu imaginación y crear un dibujo con la pintura de pizarra, lo que motivará más el estudio de los niños.
Coloca cerca del escritorio todo tipo de accesorios de almacenaje, como cajones, cestas o botes para los lápices. De esta forma, conseguirás que el niño tenga todos sus materiales a mano sin tener que levantarse de la silla. Así evitarás que se desconcentre o que busque excusas para levantarse cada dos por tres. Además, tener cada cosa en su sitio le ayudará a la hora de mantenerlo todo organizado, algo esencial para el estudio.