La mejor comida que puedes darle a tus hijos, es la que cocinas en casa, esta es una afirmación que seguro has escuchado muchas veces. Si aún no estás convencida, en este enlace encontrarás todas las ventajas de la comida casera para los niños. La alimentación complementaria puede suponer un reto para muchos padres, ya que el cuidado de los hijos y del resto de tareas puede complicar enormemente la tarea.
Aunque hoy en día es posible encontrar alimentos preparados para bebés con bastante calidad, esta nunca podrá superar a la comida preparada en casa. Es la mejor manera de controlar la calidad de los alimentos, eliminar condimentos innecesarios y evitar que tu bebé ingiera sustancias poco saludables. Siguiendo algunos trucos, puedes organizar la comida de tu bebé de un modo realmente eficiente.
Cómo organizar las comidas del bebé
Tanto si has elegido la alimentación a base de triturados, como si has elegido el método BLW (Baby Led Weaning), es importante que la comida de tu bebé sea variada y equilibrada. Si no dispones de tiempo suficiente para cocinar cada día, es necesario organices el menú cada semana para que así, lo puedas dejar preparado y envasado por raciones. La comida congelada es perfectamente saludable para los niños, y te permite tener el menú siempre preparado.
El día que vayas a hacer la compra, prepara una lista con el menú semanal de tu bebé. Así podrás comprar todos los productos que necesitarás para su comida. Además, tener a mano la lista te ayudará a la hora de cocinar y de preparar la comida del pequeño.
Trucos para cocinar de forma eficiente
A medida que tu bebé vaya probando alimentos, podrás triturar la misma comida que toméis todos en casa. Mientras que llega este momento, los purés o la comida del pequeño tendrá que ser exclusiva para no añadir sal ni otro tipo de condimentos innecesarios. Con estos trucos podrás ahorrar mucho tiempo a la hora de preparar la comida de tu bebé:
- Trocea varias piezas de verduras, por ejemplo, calabacines, zanahorias, puerro, calabaza, patata y judías verdes. Utiliza bolsas con cierre hermético para el congelador, y separa por cantidades para purés o para cocer y ofrecérselo entero al bebé. Así solo tendrás que sacar la verdura por raciones y cocer en pocos minutos.
- Utiliza envases adecuados para congelar, deben ser herméticos y del tamaño adecuado para la ración. Utiliza un marcador para anotar la fecha de preparación y cuál es el contenido del envase.
- Elige un día a la semana en el que puedas dedicar al menos una hora para cocinar, de una sola vez puedes preparar diferentes variedades de puré.
- Utiliza una mandolina para cortar las verduras, es mucho más rápido que hacerlo a mano y te permitirá obtener gran cantidad en pocos minutos.
- No te limites a cocer los alimentos, puedes utilizar varios métodos para cocinar y así preparar diferentes platos a un mismo tiempo. Por ejemplo, las verduras puedes asarlas en el horno, cocerlas en el microondas, cocerlas en una olla o hacerlas al vapor en una vaporera. Tu bebé se acostumbrará a tomar los alimentos con diferentes texturas y educarás favorablemente su paladar.
Algunos consejos extra
Extremar la limpieza es algo muy importante a la hora de cocinar, sobre todo si prepararas varios platos a la vez. Cada vez que utilices un cuchillo, una tabla de cortar o cualquier herramienta de cocina, debes limpiarlo con detergente, al igual que tus manos. En las verduras y en los alimentos animales en crudo, se encuentran muchas bacterias que pueden provocar daños importantes a la salud de tu bebé.
A la hora de preservar los alimentos, el congelado es un método totalmente fiable que mantiene la comida en perfecto estado. Para descongelar el producto, lo más recomendable es sacar el envase la noche antes y dejarlo descongelar en el frigorífico. Pero si algún día no te acuerdas o necesitas descongelarlo más rápido, el método más adecuado es introducir el recipiente en otro con agua fría.
Involucra a toda la familia en la comida
Si tienes hijos más mayores en casa, no dudes en pedirles que te ayuden con la comida. A los niños les encanta colaborar en la cocina y esto supone un gran método de aprendizaje para ellos. Colaborar en las tareas es fundamental para su desarrollo y su autonomía. Los niños deben realizar tareas en el hogar adecuadas a su edad, y ayudar en la cocina es una de las que más les gusta.