La Navidad está llamando a la puerta, en muchas ciudades este fin de semana se enciende el alumbrado navideño y se da la bienvenida a esta época tan especial. Si además le sumamos la llegada del frío, las manualidades y las tradiciones navideñas se convierten en un gran plan para hacer con niños en casa. Una de las actividades que más les gusta a los pequeños, es la repostería.
A los niños les encanta colaborar en la cocina, sobre todo cuando se trata de dulces y de pasteles que después podrán disfrutar. Las galletas navideñas son ideales para preparar con los pequeños, los moldes especiales para esta época son fáciles de utilizar. Además, los niños podrán toda su creatividad para la decoración de las pastas, además de trabajar otras áreas como la concentración.
Pastas navideñas para regalar
Además de disfrutar de las galletas en la merienda, una buena idea puede ser utilizarlas como regalo. Si vais a visitar a algún familiar estos días, no hay mejor regalo que unas galletas, sobre todo si son artesanales. Los niños estarán encantados de hacer regalos que ellos mismos han preparado.
A continuación vamos a ver dos recetas para preparar galletas navideñas, necesitarás además moldes para recortar la masa con las formas típicas de la Navidad. Además, tendrás que preparar glaseado para decorar las galletas y cualquier elemento decorativo alimentario que quieras incluir.
Galletas de jengibre
- 350 gr de harina
- 50 gr de azúcar moreno
- 50 gr de azúcar blanco
- 125 gr de mantequilla
- 100 gr de miel o sirope de arce
- 1 cucharada de jengibre
- 1 huevo
- 1/2 cucharada de canela
- 1 pizca de nuez moscada
Primero ponemos en un recipiente la harina, la canela, la nuez moscada y el jengibre, cortamos la mantequilla en trozos y la añadimos. Mezclamos bien con las manos, hasta que la mantequilla quede bien incorporada al resto de ingredientes. Ahora, añadimos a la mezcla los dos tipos de azúcar, la miel y el huevo y volvemos a mezclar con las manos. Una vez que la masa esté compacta, introducimos al frigorífico durante unos 15 minutos.
Preparamos la encimera espolvoreando harina para que la masa no se pegue, también puedes usar papel de hornear si no quieres que la masa toque la superficie. Estiramos bien la masa con un rodillo, hasta que quede con un grosor de unos 4 mm aproximadamente. Ahora, cortamos las galletas con los moldes elegidos y la vamos colocando sobre la bandeja del horno, donde habremos puesto papel de hornear previamente. Dejamos en la nevera durante unos 20 o 30 minutos.
Pasado ese tiempo, precalentamos el horno a unos 180 grados y horneamos las galletas durante unos 10 minutos. Una vez que los bordes se empiecen a dorar, las sacamos y dejamos enfriar en una rejilla. Solo tendremos que esperar a que se enfríen y pasar a decorarlas.
Galletas de Navidad
- 400 gr de harina
- 200 gr de azúcar
- 175 gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 2 huevos
- 1 sobre de levadura
- 1 pizca de sal
- 1 cucharada de azúcar avainillado
- 1 cucharadita de canela
Primero mezclamos la mantequilla con el azúcar, batimos bien con unas varillas. Aparte, mezclamos los huevos con el azúcar avainillado y los añadimos a la anterior mezcla. En un recipiente amplio, ponemos la harina, el sobre de levadura, la canela y una pizca de sal, mezclamos bien todos los ingredientes. Llega el momento de unir todos los ingredientes, los mezclamos hasta que queden bien incorporados.
Si la masa queda demasiado pegajosa, añadimos más harina hasta que quede bien compacta. Separamos la masa en dos porciones y las aplastamos para que se pueda trabajar una vez que se enfríe. Envolvemos la masa con papel film y metemos en la nevera unos 30 minutos.
Pasado ese tiempo, sacamos la masa de la nevera y preparamos la superficie espolvoreando harina. Precalentamos el horno a unos 180 grados mientras vamos cortando las galletas. Extendemos la masa con un rodillo hasta que quede con un grosor de unos 3 mm y cortamos con los moldes elegidos. Para terminar, preparamos la bandeja del horno con papel de hornear y vamos colocando las galletas.
Horneamos durante unos 10 minutos, seguirán blandas pero terminarán de endurecer una vez que se enfríen. Dejamos enfriar en una rejilla y una vez que estén listas, pasamos a la decoración elegida.