Desde pequeños, se les enseña a los niños, infinidad de tareas y formas de comportarse. Para los padres, una labor importante, es enseñar al niño a vestirse solo. Veamos algunas sencillas instrucciones que se pueden aplicar.
El aprendizaje de los niños
Los niños pueden hacer ciertas cosas mejor, e incluso más rápidas, que otras. Aprender a comer solos, hacer pipí, cepillarse los dientes…, son algunas disciplinas que aprenden alrededor de los 3 años. El niño no debe sentirse presionado a hacerlo antes y mejor que otros. Cuando el niño consigue hacerlo bien, y sin ayuda de otros, se siente autónomo y capaz.
Cada niño alcanza su meta en un tiempo, cuando está preparado y se siente motivado para ello, con lo cual no hay que angustiarse ni obligarle a nada. A la hora de vestirse, el niño en un primer momento tardará en abrocharse la chaqueta, atarse los cordones, abotonarse la camiseta…, pero la premisa es que no se desanime, y con colaboración, acabe por hacerlo solo.
Instrucciones para vestirse solo
- Vestirse con él: El niño puede ver a uno de sus padres ponerse la ropa para ir a trabajar. Puede, no solo observar y fijar, sino preguntar dudas. Incluso puede intervenir y ayudar a poner los zapatos u otra prenda. Dejarle, que como juego, se vista con ropa de sus padres, les divierte mucho, y asimismo les sirve de práctica.
- Ayudarle: Al principio se debe ayudar al niño a vestirse, y poco a poco dejarle que abarque más y lo intente. Inicialmente, es recomendable dejarle que se vista las prendas más sencillas de poner, y ayudarle con las que tienen mayor dificultad. Según logre vestirse bien una prenda durante varios días, se le pedirá que continúe con la siguiente.
- La ropa: Es preferible, para comenzar, no hacerle ponerse ropa con muchos botones, cordones…, elementos algo complejos. Los cuellos deben ser anchos, la cintura con elástico… Cuantas más facilidades menos se desesperará el niño.
- La colocación: Sería de gran utilidad explicarle que la etiqueta de la camiseta, falda o pantalón va en la parte de atrás, y que los dibujos en la parte delantera. Las punteras de los zapatos deben mirarse. La cremallera o los bolsillos del pantalón deben mirar hacia delante.
- Sin agobios: No es conveniente ponerle un plazo de tiempo para que se vista y dejarle que lo haga con tranquilidad. Es cierto que en ocasiones los horarios mandan, no obstante, no hay prisa en cuanto a creatividad e ilusión. Levantarse antes es una posibilidad.
- Momentos de diversión y sin normas: Que el niño no se aburra o agobie con lo de ir bien vestido y arreglado. Tanto rigor puede estresarle. Puede haber ocasiones donde no existan las reglas y sí el relax y diversión. Que sea él quien a veces elija lo que más le guste, que se vista cómo quiera, o bien que se ponga eses disfraces que tanto le hacen reír.